Envío Inalámbrico de Música o Streaming por WiFi (parte 2)
- La transmisión y recepción de música WiFi en cierta forma es un híbrido alámbrico e inalámbrico pues involucra dispositivos con ambas características ya que emplea una conectividad por cableado estructurado, así como la ubicación de varios dispositivos para asegurar la cobertura por todo tu hogar, tanto en interiores como en el exterior.
- Usualmente tú como usuario solo ves un producto que entrega el proveedor de servicios de internet y es un modem. Este producto es la combinación de un router + switcher + WAP, dicho en español es un ruteador (router) que enlaza el servicio del proveedor de internet de la calle a la casa, un conmutador (switcher) con algunos puertos de interconexión RJ45 para algunos dispositivos por cable y punto de acceso inalámbrico (WAP), ya integrado para comunicar equipos portátiles sin cables.
- Ahora sobre la cuestión streaming, el usuario deberá contar con un servicio de administración de archivos musicales para poder saber dónde está ubicado, como está organizado, que buscar y elegir lo que quiere escuchar. Para esto, podemos tener ya una librería con lo que fueron nuestros discos compactos y tenerlos “ripeados” en nuestra computadora como archivos WAV, ALAC, FLAC, etc. Con los usuarios de alto rendimiento, Roon es la respuesta con librerías en disco duro.
- Olvídate de los miles de archivos MP3 en una memoria USB que puedas tener, pues su calidad en audio es inferior.
- Usualmente el software de administración nos permitirá no solo identificar nuestras librerías (artista, canción, álbum, portada, género, etc), sino también tener por una módica cantidad de dinero mensualmente, acceso a música por compra e incluso “prestada” como archivos DRM (gestión de derechos digitales), que puedes escuchar sin tener que adquirir canciones, más no almacenarlas permanentemente.
- Los proveedores de servicios en nube como iTunes, Spotify, Tidal, Deezer, Qobuz, nos permiten comprar música o simplemente escuchar cualquier cosa mientras estemos suscritos a su servicio. Los beneficios son contenidos musicales personalizados, resolución en los archivos a la carta (PCM, MQA, DSD, FLAC), accesibilidad fuera en línea, listas de reproducción acordes a nuestro gusto, etcétera.
- Es muy importante en primer lugar los contenidos pues no todos los proveedores de servicios en nube de música ofrecen lo mismo. Si te gusta cierto tipo de pop, jazz, clásico o rock progresivo, no todos cuentan con la variedad de uno u otro. Contrata el servicio que más se apegue a tu gusto.
- El segundo punto vital es la resolución de los archivos musicales. Atrás han quedado los archivos en MP3 por su bajo desempeño en audio y se buscan dos objetivos: que pueda escucharse la música en dispositivos móviles con la mejor calidad y sin caída en la señal (dropouts) y ya en casita, apreciar con la mayor nitidez nuestras melodías en equipos de audio dedicados (altavoces, amplificación, procesamiento y conversión digital a analógica)
- El tercer factor clave es el reproductor. Este componente incluye diversos elementos que pueden hacer una sublime experiencia u obtener el desempeño semejante al de un radio portátil. Tenemos que entender que no por ser súper-duper-alta-tecnología significa que todo estará bien de principio a fin pues la expectativa de servirnos una langosta puede quedar en tan solo unas tostadas con surimi. En la era dorada del audio estéreo, manejábamos este concepto “la cadena de audio”, donde fuentes de señal + preamplificador + amplificador de poder + altavoces, daban como resultado el mejor sonido posible con los equipos que correctamente combinaras y pagarás por ellos.
- Son variados los productos que cuentan con esta tecnología de conectividad por WiFi para escoger el adecuado a nuestras necesidades. Por ejemplo, un receptor AV para cine en casa, tenemos en Onkyo el TX-NR5100B o una versión estéreo es el TX-8270; en Yamaha está el RX-A4A receptor AV o en forma de barra de sonido como la YAS-109. Un líder en la industria es la marca Sonos y tenemos desde una bocina Move o una barra de sonido ARC con todo y asistente virtual.
- Finalmente, el cuarto punto neurálgico es el entorno de red. Esta es la columna vertebral para que todo funcione a semejanza de un ecosistema completo, sea el hogar o un corporativo donde pueden estar involucrados sistemas como los siguientes:
- Iluminación, en su programación, operación y control;
- CCTV, cámaras, almacenamiento y verificación remota;
- Control de accesos, para quienes tienen los permisos y cuando y donde lo hicieron;
- Clima, mantener nuestros espacios con ambientes confortables y ahorro de energía;
- Telefonía, la usual, operar via IP y realizar conferencias virtuales ¡con la familia!
- Audio, en distribución por todas las áreas así como su control;
- Video, nuevamente esparcida por varias zonas y con alta calidad en imagen.
- Al contar con una red robusta, es posible capturar y recibir prácticamente cualquier señal y datos desde cualquier punto. El entorno es tan flexible como los dispositivos de la red, para tener una amplia cobertura.
- La distancia no es una limitante, sea en áreas interiores o exteriores.
- El tamaño del archivo es irrelevante, la calidad lo es todo.
- Es posible compartir desde una o varias fuentes (dispositivos móviles o fijos), a uno o varios receptores.
- El nivel de reproducción dependerá del receptor y su cadena de audio, así como del servicio contratado. Ser congruentes con lo que es. Hay un dicho que yo uso frecuentemente “el que tiene para whiskey, tiene para hielos”.
Autor: Antonio Legorreta